Así nació Feylo

Feylo empezó como empiezan muchos sueños: en casa, entre velas, pinceles y ganas de crear.

Éramos Fernando y Lorena, jugando a emprender, imaginando algo propio. Con el tiempo, ese juego se volvió un proyecto de vida. Así nació Feylo: una mezcla de nombres y de pasiones.

Pasaron más de 20 años, y aunque crecimos, seguimos sintiéndonos del otro lado del mostrador.

Porque antes de ser comerciantes, fuimos artesanos.

Y por eso entendemos lo que buscás, lo que necesitás, lo que sentís cuando creás.

Estamos acá para acompañarte, como alguien que ya recorrió ese camino… y que nunca dejó de caminarlo.